Masajes

martes, 24 de agosto de 2010

Relájate... Renuévate...

Transforma un rincón de tu casa en tu spa.

No te propongo que reformes tu baño... simplemente te doy unos tips para que te renueves éste domingo y que comiences la semana renovada.

Como dato: El vocablo proviene del latín “Solus per aqua” (salud mediante el agua). Los SPA datan de finales del medioevo en Europa continental e Inglaterra, e inicialmente se identificó con instalaciones cerca de manantiales de aguas termales. Sus primeros visitantes eran personas de alto rango y linaje quienes lo visitaban como símbolo de status social.

Mímate

Si quieres relajarte en casa te sugiero que al despertar te estires muy bien antes de levantarte.
Toma un desayuno fresco y saludable. Incluye cereales, frutas y una infusión o jugo de frutas.

Luego toma un baño caliente. Pero antes de entrar a la ducha hazte una exfoliación para eliminar las impurezas de todo tu cuerpo. El vapor ayudará a suavizar tu piel y facilitará la exfoliación devolviéndole suavidad y resplandor a tu cuerpo al remover las células muertas. También podrías usar una esponja vegetal para mejores resultados.Una vez en la ducha alterna con agua fría y caliente para estimular la circulación sanguínea, finaliza con agua fría. Si te resulta cómodo quédate en bata o toalla.

Hazte una limpieza de cutis y una exfoliación, puedes aprovechar para aplicarte una mascarilla desincrustante o hidratante.

Aplícate en el cabello una mascarilla revitalizante y envuélvelo. Mientras espera a que haga efecto prepárate un té de hierbas (las que más te gusten) o un jugo de frutas de estación.

Enciende un incienso u hornito con la fragancia que te resulte más deliciosa. Si no tienes o no te gustan, en lugar de esto puedes ponerte tu perfume favorito.

Procura que la luz sea tenue y si quieres enciende unas velas. Pon una música suave.

Métete nuevamente a la ducha y retira las mascarillas.

No olvides alternan la temperatura del agua y finalizar con agua fría.

Al salir de la ducha sécate bien y aplícate crema hidratante para el cuerpo mediante suaves masajes circulares.

En tu rostro y cuello aplica una crema hidratante acorde a las necesidades de tu piel.

Busca un rincón apacible en tu hogar, siéntate cómoda a relajarte mientras continúas embelleciéndote.

Si quieres, puedes colocar tus pies en un recipiente con agua tibia, sales y esencia. También puedes aprovechar para embellecerlos pasándoles una piedra pómez para eliminar callos y asperezas. En los dedos, con la ayuda de la crema, empuja las cutículas de las uñas hacia atrás, no las cortes. Corta tus uñas de forma cuadrada y después límalas. Podrías hacer algo similar en tus manos.

Luego ponte cómoda, puedes estar sentada o acostada. Cierra los ojos y transpórtate.
Siente tu cuerpo cada vez más pesado. Comienza por tus pies, tus piernas... tus manos, tus brazos... el tronco... tu cuello y hombros... y por último tu rostro y tu cabeza.

Libera tu mente de preocupaciones...
Si te cuesta la relajación "forzada", puedes optar por salir a pasear por un lugar que te distraiga y relaje, en el que puedas estar en contacto con la naturaleza. Respira aire puro, pon a tus pies en contacto directo con la naturaleza caminando por la tierra, el césped o la arena. Recuéstate bajo un árbol o bajo el sol y siente cómo te cargas nuevamente de energía positiva.



Espero que les haya gustado y que lo puedan poner en práctica.

Gabriela Rocha
MASOTERAPEUTA



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